A finales del siglo XIX, un emprendedor aranés decide establecer en Vielha la primera fábrica lanera de Arán: una fábrica que aprovechará la fuerza del agua del río Nere para mover su maquinaria. Esta industria supondrá un avance y un desahogo para muchas mujeres aranesas, pues la transformación de la lana en madejas, de manera mecánica, evitará las largas horas de laboreo invernal para producir el hilo.
De la lana virgen al hilo, del hilo a la madeja y hasta aquí podemos contar…
¡Visita la fábrica y tu mismo lo descubrirás!